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Yoga Integral

Palabras de Paramahansa Yogananda

Palabras de Paramahansa Yogananda "El anhelo de recuperar la perfección que hemos perdido, el impulso que nos urge a manifestar lo más noble en el ser y en el hacer, a expresar lo más hermoso de que somos capaces, es el impulso creador que motiva todo logro elevado. Nos esforzamos, en verdad, por alcanzar la perfección en este mundo porque anhelamos recobrar nuestra unidad con Dios".

Paramahansa Yogananda nació en la última década del siglo XIX, el 5 de enero de 1893, en el seno de una familia acomodada perteneciente a la casta de los kshatriyas (guerreros y gobernantes, la segunda en el sistema tradicional de castas de la India). Aunque la mayor parte de la vida del maestro transcurrió en Occidente, la India lo considera uno de sus más grandes santos.
Jamás despertó en Occidente –cuya población es mayoritariamente cristiana– controversias ni rechazos a su doctrina, pues el mensaje que le habían solicitado difundir (Babaji, maestro avatar de la India moderna, y el venerado santo hindú Lahiri Mahasaya, a través de su gurú Sri Yukteswar Giri) apuntaba a la tolerancia, a la unión de todas las religiones y a comprender que los libros sagrados de Oriente y Occidente, en sus fundamentos mismos, ofrecen las mismas enseñanzas.
Describió a sus maestros y sus mágicas hazañas en su libro Autobiografía de un Yogui, un relato fascinante de su búsqueda de la verdad, que constituye, en el presente, un clásico de la literatura religiosa.
Yogananda, verdadero apóstol de la paz y ferviente creyente en la hermandad humana, dejó un legado que sigue floreciendo y expandiéndose en todos los países de las Américas, Europa y Australia bajo el nombre de Self-Realization Fellowship (Asociación para la Autorrealización), organización fundada en 1920 en California para difundir sus enseñanzas en Occidente.

Ver también: Inner Reflections (agenda fotográfica con citas)

[Fuente: Espinoso.org]

1 comentario

Maitreya Raja -

La lectura de este libro me ha dejado impresionado y ha llenado mi vida de una profunda humildad. Nunca como ahora he visto lo cotidiano como algo milagroso y viceversa. Así es que me pongo en manos de Dios y que El haga que encuentre en mi vida lo que desea para mí. Agradezco mucho a Yogananda este libro y me pongo bajo su protección.